Este proyecto es un homenaje visual a quienes se mueven sin hacer ruido: personas reales que caminan, cargan, suben, madrugan...sin hashtags ni likes. Bajo una estética inspirada en las grandes campañas deportivas, el spot pone en valor a los verdaderos atletas del día a día,desde una abuela que camina por la playa con su plátano, hasta un joven que desayuna a las 5 AM para alcanzar sus metas.

Guiado por un narrador que camina a través de distintos paisajes canarios, el vídeo mezcla humor, emoción y orgullo local para lanzar un mensaje claro: el plátano es energía real para todos los cuerpos, no solo para los de portada. Un manifiesto visual sobre salud, actitud y movimiento.